¿Quieres ponerte a dieta para recuperar la figura? Para evitar fracasos y decepciones hay que comenzar con el pie derecho, y ser capaz de hacer frente a las dificultades. Veamos cómo.
Si simplemente no puedes soportar los kilos de más y quieres volver a verte en forma, es el momento de ponerte a dieta.
Pero… Entre el dicho y el hecho, hay mucho trecho… lleno de errores! Para bajar de peso realmente, de hecho, no basta la simple decisión de ponerse a dieta. Para iniciar con el pie derecho, esperando obtener resultados válidos y sustentables en el tiempo, es necesario tener bien en calro algunos conceptos. Veamos
1. La dieta ayuda a perder peso: no cambia el metabolismo! Al iniciar una dieta, pero sobre todo mientras se sigue, siempre se anhela secretamente con el momento de, finalmente, volver a comer como de costumbre. Por desgracia esto no es posible: volver a comer como antes de la dieta reproduciría las condiciones que llevaron al sobrepeso. El mantenimiento, sin embargo, es menos difícil que la fase de adelgazar, y esto te permitirá alcanzar un buen estado de equilibrio entre lo que puedes hacer y lo que será mejor evitar.
2. Es necesaria una educación alimentaria y de comportamiento como parte integral del programa de alimentación. El témino dieta no significa comer menos sino más higiene de vida. No es necesario seguir de manera rígida y superficial una dieta … es mejor tratar de entender y aprender tanto como sea posible para no caer en los errores anteriores!
3. Es esencial un programa a largo plazo, que se extiende hasta la consolidación de los resultados obtenidos. Si la mitad del trabajo es lograr el peso ideal, la otra mitad será mantenerlo en el tiempo.
4. «Hago dieta por mi cuenta» no sirve. De todas las maneras de hacer una dieta, la que rinde menos frutos es, por lo general, tratar de arreglarse uno mismo, decisión que usualmente comienza y termina en un corto período y, además, sin ningún resultado. El hecho es que no se trata sólo de bajar de peso, sino de aprender a alimentarse; es importante tener un punto de referencia no sólo psicológico, sino también (que ya es mucho) informativo.
Existirían un número infinito de otros aspectos a tener en cuenta, pero lo que realmente importa no es tanto el número de consejos recibidos como la voluntad de ponerlos en práctica.
Está claro que simplemente comer menos no es suficiente: tenemos que apoyar el deseo de estar mejor con algún otro importante pilar.